Me dice una
amiga que me lee, que sueno rencorosa y resentida con el género masculino, que eso es reflejo
del momento vital en el que estoy, que voy con el cuchillo en la boca en esto del amor y que así va a ser imposible
encontrar al hombre de mi vida.No le contesto nada y que ella decida si el que calla otorga.
Me dice otra amiga que cualquiera que me lea va a pensar que ser
soltera solo tiene inconvenientes, y que tal y como yo lo pinto parece una condena; y no un
fascinante estado de libre albedrio escogido voluntariamente.
Me dice mi amigo
gay que sueno amazing y que se rió mucho
viéndose retratado en una de mis entradas.
Me dice un conocido que sueno pesimista, le
digo que eso es porque no me conoce
suficientemente, pero que yo he sido una pesimista convencida desde que tengo uso de razón.
Me dicen
muchas amigas que les gusta mucho lo que escribo y como lo escribo.
Hay otros amigos que no me dicen absolutamente
nada.
Me dice un
tercero amigo, que siempre me está picando, que esos que no me dicen nada es
porque me tienen miedo; simplemente le amenazo con sacarlo en el blog y se calla .
Hay otro amigo que me pide temas que dice son de
inquietud popular entre el género masculino: porque nos comportamos así o asá ,
que pensamos de ellos …..Vamos como si yo fuese el disc jockey de la discoteca.
Me dice una
amiga soltera y cuarentona, que doy a
entender que no hay vida más allá de los 40, y que ella es superfeliz y se
siente superealizada y que a mí tampoco me queda tanto para llegar a ellos ; y que por
lo tanto que me vaya poniendo las pilas.
Me dice una
desconocida que ella no es nadie para
juzgarme, pero que le da la sensación que tengo un problema grave de
egocentrismo, y que si no me estaré pasando de listilla.
Me dice un
amigo ,que es mi azote particular, que estoy creando un monstruo, y corro el
riesgo de ser devorado por él. Le digo que ya me gustaría, pero que para eso
necesitaría que me leyesen 600 personas y no las escasas 60 ( como mucho) que me leen
al día.
Y finalmente
esta mi madre, que me dice que a ver cuándo
maduro de una vez y me dejo de tonterías , que me estoy pasando y mucho con
esto de alargar la adolescencia.
Increíble,
dos días escribiendo estas entradillas y ya tengo el síndrome del artista
incomprendido……….
miércoles, 26 de febrero de 2014
EL DÍA DE MI
BODA
Al contrario
que muchas mujeres , nunca me imaginé como sería mi boda. Me he imaginado en
situaciones tan variopintas que darían para la tesis de un psicólogo de la escuela
conductista, pero nunca pensé como sería
el vestido que llevaría ( y mira que me gustan), ni donde
sería , ni mucho menos con quien. Tengo
una amiga que a los 15 años sabía hasta
que tipo de flores llevaría en el
ramo. También es verdad que esa amiga , supongo que por eso de que proyectar lo
que quieres es el primer paso para conseguirlo , ahora está casada y yo sigo
soltera.
Por ello voy
a hablar de las bodas desde el punto de vista de usuaria invitada o de victima
invitada, según de quien sea la boda. Porque están las bodas a las que quieres
ir y las bodas a las que tienes que ir. Las dos te dejan arruinada y sin
vacaciones pero a las primeras sueles ir con una mejor predisposición.
Lo que más me
gusta de las bodas es que la gente es
feliz, y tu aunque sea por efecto contagio, pues también. Lo que menos me gusta , que son muy previsibles y de antemano ya sabes
como van a acabar, y esto a mi me da un poco de pereza.
Alguien
pensará que yo soy una resentida y que en el fondo lo que me jode es ser
usuaria y no protagonista. Que puedo decir, es lo bueno y lo malo del blog, que
cada uno se imagina lo que le da la gana. Asique voy a hacer una crítica
constructiva o destructiva de las bodas, esto también lo dejo a opinión del
lector.
Las invitaciones
Por favor nada de palomas, anillos,
novios-niños, exceso de dorados y filigranas , texto telegrama …..¡un poco de
imaginación! .Y la confirmación por teléfono , yo la vía Facebook la sigo viendo impersonal.
El regalo
No me gustan
las listas de bodas , van contra el pequeño comercio ,contra la libertad individual y además
impiden al usuario el placer de romperse la cabeza pensándolo. ¿Habrá cosa más
bonita que al final los novios tengan 4 juegos de té exactamente iguales?.Todos ellos comprados por
supuesto en unos grandes almacenes y no en un pequeño comercio. Esto forma
parte del ritual y el paseo a descambiarlos también.
El tipo de
ceremonia
Yo aquí solo
pediría un poco de coherencia bien sea por lo civil, por la Iglesia o por el rito
zulú. Que yo he tenido que escuchar de boca de alguna que se casaba en la Iglesia
porque el fondo para las fotos era mucho
mejor, o por no contradecir a la tía abuela. Como probablemente ya tengas más
de 30 años cuando te cases, solo puedo decir que ya deberías haber aprendido a decir "no".
El vehículo
¿Porqué a
todo el mundo en los últimos 10 años le
ha dado por los coches de época?¿Qué hay de las motos? A mi me parecen mucho
más originales y románticas. Que sea una Vespa, una Harley o una de motocross, esto ya dependerá del estilo de los contrayentes.
El vestido
de la novia
Aquí tengo
una opinión muy formada después de tragarme todos los realitys sobre el tema de
la Divinity, a saber :Novias de Beverly Hills , Novias del medio oeste, Novias
de saldo…….pero entiendo que el gusto es muy particular y que cada una va como
le da la real gana, que para eso es su día. Solo me permitiría dar un consejo a
todas las novias del mundo que a mí me ha sido muy útil
en la vida diaria: menos es más.
La ceremonia
en sí.
Yo he estado en bodas muy emotivas y a la vez
muy sobrias y contenidas en las que me
he emocionado, y mucho. Pero también he estado en otras que tan emotivas pretendían
ser que simplemente se quedaron en ñoñas. Recuerdo una en la que en un momento
dado había que dar besos a una caja de madera que iba rulando por entre los
presentes para depositar tus buenos deseos. Sinceramente después de una hora de ceremonia, con 35
grados a la sombra, la gripe aviar en el aire y tu de pie subida a unos tacones
de 10 cm, pues como que no lo veo.
Yo que soy
muy teatrera y a veces muy proamericana, echo de menos que no se diga la
parte esa de “si hay alguien entre los asistentes que se oponga a esta unión
que lo diga ahora o que calle para
siempre….”. Sinceramente pienso que esto le daría mucha vidilla a la cosa.
Aunque está claro que los españoles, más de comentar las cosas en petite comité delante
de una copa, se lo guardarían para la
noche durante el momento barra fija, cosa que es mucho peor desde mi punto de
vista, porque el daño ya está hecho.
Los canapés
A mi este
momento es de los que más me gustan. Soy una fan acérrima del canapé: del
novelle canapé, del canapé de toda la
vida, de los deconstruidos, de los que vienen en cazuelita, de los que flotan en un vasito, de los que están ensartados en un
palo, dulces, salados………Es más yo hasta prescindiría de la comida y alargaría
el momento canapé hasta las 7 de la tarde. Además este es el momento el que yo
intimo con el camarero, no seais mal pensados, en plan inocente ,y porque sé
que es la persona con la que más voy a interactuar a lo largo de todo el día.
El momento
que se besen
Si ya sabeis
de que os hablo, cuando los asistentes durante la comida , ya con un considerable
grado de alcoholemia; enfervorecidos solicitan con vítores que se besen los novios,
que se bese el padre de la novia con la
suegra del novio, el gato del novio con la perra de la novia, la ex del novio
con la que estuvo 10 años con el propio novio. …..A ver, una cosa es darle vidilla a la fiesta, y otra avivar de forma
premeditada las tensiones subyacentes existentes .Eso es de ser malas personas.
La entrega
del detalle
Este
apartado merecería una entrada en exclusiva o un rincón en el museo de los horrores.
Asique yo voy a centrarme en el momento cuando la novia o el novio aprovechan para
preguntarte que tal todo. Que yo sé que lo hacen con toda la buena intención
del mundo porque han currado mucho para que la boda fuese un éxito, pero seamos realistas…..¿Qué
esperan que les digas? Que te parecía que el gambón no estaba del todo fresco,
que sabes que lo de colocar a la gente es muy difícil, pero ponerte con los
niños ha sido un poco golpe bajo, o que si la tía abuela te vuelve a preguntar
para cuando tu boda, tu tienes miedo de hacer como Michael Douglas en Un día de furia. Pues como esto no es plan,
tu evidentemente dices que todo muy bien
y que esperas con ansias la fiesta del bautizo del primer hijo.
El baile
Este es el
fin de fiesta, ellos llevan la corbata a modo de turbante , ellas alpargatas de
esparto y la tia abuela fuma un puro. Hace
tiempo que la gente ya perdió las formas, tu incluida, que ya sabes hasta
cuantos hijos tiene el camarero. Y bailas la macarena, y te unes al trenecito
de Paquito el chocolatero . Y si es una de esas bodas a las que no querías ir
pues piensas que oye al final te lo has
pasado bien , y si es de esas bodas a las que querías ir, pues te da mucho
penita, porque sabes que ese amigo/a está cambiando de estado y un poco egoístamente
te temes que las cosas ya no van a ser nunca como antes .
Y la cínica
que llevas dentro no puede evitar recordar lo que decía Sacha Gvitry: El secreto de un matrimonio feliz es perdonarse mutuamente el
haberse casado. Pero en
ambos casos tú te alegras por ellos y de todo corazón les deseas que sean muy
felices.
lunes, 24 de febrero de 2014
DE PORQUE LOS HOMBRES SON SIMPLES Y NOSOTRAS NOS NEGAMOS A
CREERLO
Desde que eres pequeña te dan informaciones erróneas o como
mínimo contradictorias sobre el sexo opuesto.A estas enseñanzas se une
la factoría Disney, los cuentos populares, las teleseries de adolescentes
y Candace Bushnell , que acaba de
hacerte el lio. Esto hace que cuando creces tengas ideas tan confusas sobre el
comportamiento del que se supone que tiene que ser tu media naranja, que andes por ahí vagando como medio limón en pena.
Cuando eres una niña y algún niño te hace alguna perrería en
el patio del colegio ,tu probablemente correrás a contárselo a tu madre. Y ella
probablemente justifique su comportamiento en el hecho de que le gustas, incluso
puede que vaya más allá y te diga que le
gustas mucho. A ti esta información como
poco no te cuadra…. porque normalmente tu a él tiendes a darle besos y no
patadas. Por esta regla de tres yo ahora debería estar felizmente
casada , con tres hijos y un plan de pensiones con Santiago ,el vecinito de enfrente
que martirizó mi infancia. Como aquel día en el callejón oscuro de mi barrio que a modo de pistoleros del oeste, uno
en cada extremo del mismo , el me enseñó una piedra de tamaño considerable y se
ofreció a tirármela a la cabeza , y yo, con esa
incapacidad para ver el riesgo que aún conservo, le reté a ello. El resultado
no es difícil de adivinar .Con el tiempo descubrí que Santiago no me quería,
sino que simplemente vio su hombría puesta en tela de juicio y actuó en
consecuencia.
Cuando eres una adolescente no se produce una gran mejoría. Tú con tus
espinillas, tus hormonas en ebullición, la presión de la pandilla y ellos que van por detrás de ti dos años en su
desarrollo psicosocial. Aqui cada vez que uno tiene un comportamiento
inexplicable tu corres a los brazos de tus amigas -después de lo de Santiago
hay algo que te hace desconfiar de tu madre-. Casi todas te dirán que el
problema es que aún es un niño .Y la más
romanticona, esa que siempre lo ve todo de color rosa, te dirá que ella
cree que Pablo esta realmente por ti, aunque se magree con todas a la salida
del tuto. Vamos que continúan las justificaciones :la falta de madurez y la
promiscuidad. Que tu estas en la misma
tesitura, pero tu has forrado tu carpeta con sus fotos y le has entregado tu corazoncito en forma de poema en hoja de
bloc. Y que él te lo pague así…. ¡duele y mucho!
Cuando te conviertes en una adulta la cosa empeora, las justificaciones empiezan a ser más elaboradas , porque la coyuntura es
mucho más complicada: que si acaba de salir de una relación seria, que si nunca
tuvo una relación seria, que si es demasiado joven para comprometerse, que si
ya es demasiado mayor .Aquí el circulo
de sabias también se ha agrandado: aparte de las amigas, están las conocidas, las
compañeras de facultad o del trabajo y la
tia de la madre de la vecina. Y como no, todos los ensayos que hablan del tema. Estos recogen teorías muy
variadas :Que si los hombres se convierten en eternos niños porque sienten que las mujeres triunfadoras no los necesitan,
que si el infantilismo que impera en la sociedad hace que realmente jamás corten
el cordón umbilical, que si la liberación femenina los dejó totalmente
confundidos y no saben que rol deben adoptar ,si el del macho alfa o el del amigo
gay, que si la coyuntura económica hace que la convivencia se retrase mucho y
por tanto no hay compromiso real……
Todo esto amigas mías son paparruchas (como me gusta esta
palabra), y lo sé ahora que he llegado a una cierta edad (que poco me gusta esta frase) ,en la que he
sufrido en mis carnes el comportamiento masculino; y porque conozco a un número considierable de solterones
de más de 40, que han aportado luz al tema . Ellos me han revelado el secreto mejor guardado después de el
de la cocacola: los tios son simples y nosotras nos negamos a creerlo .Alguno
dice que que no son es simples sino sencillos, esto no
es más que un eufemismo, y traducido
significa que son simples pero tienen cultura.Y alguno llega más lejos aún
atribuyéndonos a nosotras la culpa de tanta confusión, por esperar de ellos más
de lo que realmente pueden dar.
Como idea global se puede decir que los hombres son los mismos a
los 18 que a los 40, solo han cambiado el tipo de juguetes, que aumentan
cualitativamente , y los complejos ,que aumentan cuantitativamente.
Nosotras , que somos capaces de darle tantas vueltas a algo
hasta perder de vista ese algo, que somos las reinas del “ y si…..”, que podemos decir "si" y "no" sin ni siquiera abrir la boca, que vemos el
hecho de pensar en nada como una proeza que no está a nuestro alcance …….. pues que quereis que os diga, que la tragedia griega esta servida.
Así ,siempre habrá un alma caritativa , normalmente de tu
mismo género, que justifique el comportamiento del hombre en cuestión.Pongo
ejemplos: el no te ha llamado después de una primera cita.... puede que haya
perdido tu teléfono, él no te llamó después de la primera bronca tras cuatro meses ….no se siente preparado para una relación seria,
después de una gran bronca a los cuatro
años…..está sobrepasado por la relación seria que ya tuvisteis......No nos engañemos
por favor : no te ha llamado porque no le ha salido de las gónadas llamarte.
Asique interiorizar
estas premisas amigas : si un hombre no te llama es porque no le interesas,
sabe si te quiere a los dos meses de de conocerte, si te dice que te quiere
realmente te quiere ; y si no te lo dice
es que no te quiere o no han pasado dos meses. Vamos que ni ex recientes, ni miedo al
compromiso, ni dudas existencias, ni coyuntura económica , ni la abuela que
fuma en pipa………..
Pero claro , esto es muy doloroso de asumir por nosotras. Entonces
desde que la tierra es tierra y en ella estaba Eva , que salió de una costilla
y Adán que mordió la manzana , y todo el
tinglado; nosotras pensamos que le estamos haciendo un favor a la amiga de
turno, y por extensión a nosotras mismas, justificando lo injustificable.
Se que hay cosas muy
difíciles de asumir: que la cabeza rapada solo le sienta bien a Sinéad O'Connor,
que no volverás a entrar en los levis que llevabas a los 17 años, y que lo que te está diciendo u omitiendo un hombre es realmente lo que piensa.Es duro, pero
aceptémoslo de una vez y seremos todas más felices.
viernes, 21 de febrero de 2014
UN PARÉNTESIS
Cuando empecé
a escribir este blog, no sabía muy bien sobre que iba a escribir, es más no
tenía claro que pudiese escribir. Aunque yo era de esas niñas que se alegraban cuando de deberes había
redacción, nada me parece más difícil que escribir; y escribir bien ya lo considero de personas geniales.
Siempre me
he expresado mejor escribiendo que hablando, es más cuando tengo que decirle algo
importante a alguien necesito escribirlo primero. Así puedo ordenar mis ideas y
controlar mi natural impulsividad y esa forma de decir las cosas de forma tan
directa , que me caracteriza, y que a veces tantos problemas me crea.
Podría
hablar sobre temas mucho más profundos y
que realmente me preocupan, como de la vergonzosa clase política que nos está
arrastrando a la hecatombe, o de leyes tan retrógradas como la del aborto que
hace que se me revuelvan las tripas.Pero justamente porque me preocupan tanto y
considero que ya se habla lo suficientemente
de ello he decidido no ir por ahí.
Simplemente quería que mis entradas fuesen una especie de respiro para mí y
para el que los lee.
También podría hablar de cientos de
temas que me interesan, pero en los que nunca tengo la suficiente paciencia de
profundizar , vamos que soy capaz de
hablar de cualquier cosa mientras no se
ponga seria. Soy una de esas personas que sacan nota si las llevas a un coctel,
pero que hacen aguas si las llevas a un symposium.
Por todo
ello hablo un poco del momento en el que estoy , en el que parece que se junta
la crisis económica, con la de los treinta y la de valores.En la que todo el
mundo parece estar algo deprimido o como mínimo confundido. Y aquí me incluyo
yo, porque muchos días no puedo evitar sentirme parte de esa generación perdida y
preguntarme quien se ha comido mis
perdices.
Dice Cate
Blanchett en la última peli de Allen, Blue Jasmine, que en la vida de todo ser humano hay un
número límite de traumas que este puede soportar.
A diferencia de ella, no me dio por mezclar los antidepresivos con dry martinis, a mi me
dio por escribir….
Aunque me
ruborizo solo de pensarlo , también tengo que admitir que lo que yo quiero
realmente es emular a mi admirada Elvira Lindo, no la escritora de novelas, sino
a la autora de Manolito Gafotas y a la articulista. Elvira me parece una mujer con
esa sensibilidad inteligente tan difícil de conseguir y de una coherencia extrema. Pero lo que más me
admira de ella es esa capacidad para
reírse de si misma con tanta elegancia. Cada vez que releo sus Tintos de
verano, me reconcilio con la especie humana. Y me gusta pensar que con los mios
consigo algo parecido, mezclando realidad, exageración y deformación a partes iguales.
Cada vez que
alguien me dice que le gustó leerme , no puedo evitar que mi primer pensamiento
sea que lo dice únicamente por agradarme. No lo puedo evitar, tengo muy
asumidos mis múltiples defectos, pero a veces soy incapaz de aceptar un
cumplido.Yo creo que la culpa de esto la
tiene mi madre , más partidaria de la educación de la vieja guardia stalinista que de la del refuerzo positivo de Super Nani.
Escribir tiene algo de terapia , de reto ,de
pequeña venganza y bastante de egocentrismo. De terapia porque es una forma de
ver tu vida desde fuera, y todo visto desde fuera se relativiza y pierde importancia. De reto
porque tienes que escarbar dentro de ti y eso siempre es un poco doloroso. De
pequeña venganza , por todas esas veces
en las que deseaste golpear a un
gilipollas con otro gilipollas , y como está mal visto no lo hiciste; y de
egocentrismo porque aunque hables de Star Trek, en el fondo estás hablando de
ti.
Aunque cualquiera pudiera pensar que estas entradas me llevaron 5 minutos , por su sencillez, creedme que están bastante
pensadas. Incluso cuando termino una , mi carácter un poco neurótico y obsesivo
me hace revisarlas mil veces. Y una vez
colgadas me es imposible no pensar que debería haber añadido esto o
quitado lo otro,o que alguien se va a molestar, o que se las va a tomar al pie de la letra.
Nunca pensé que tomarse en broma a una misma fuese una cosa tan seria.
martes, 18 de febrero de 2014
MANERAS DE ROMPER
Como toda treinteañera que no ha estado retirada en un
convento, a lo largo de mi vida he tenido bastantes relaciones. Aquí dejo a la
imaginación malévola de cada uno cuantas
se consideran bastantes , que no es cuestión de darlo todo hecho.Y no puedo más
que echar de menos el emoticón que saca la lengua, por ser mi preferido y
porque me ayudaría mucho en esta ocasión.
Estas relaciones han
durado varias semanas , varios meses y alguna que otra formal que duró años y que incluían una convivencia.
Algunas las recuerdo con mucho cariño,
otras todavía me duelen ,y para que engañarnos otras han sido tan
insustanciales que las he olvidado.
Una relación puede caracterizarse por cientos de variantes: por cómo empezó, por el estado vital en el que te encontrabas , por el que ansiabas encontrarte , por el recuerdo que te dejó, por lo que aprendiste (si es que aprendiste
algo )…… y así muchas más. Pero probablemente algo definitivo fue como acabó. Sinceramente pienso que la forma
en la que una persona rompe con otra dice bastante de esa persona .
Vayamos con otra de
mis clasificaciones. Cualquier psicólogo diría que esta obsesión mía con las
clasificaciones responde a un deseo desesperado por poner orden en mi
aparentemente caótica vida, haciendo reducciones simplistas y generalistas de
todo. A estas alturas sinceramente lo que diga un psicólogo, me chupa un pie, asique sin
más voy al lio.
Estan esas rupturas que se producen de una forma casi
natural. Se llega a ellas sin darse cuenta y casi ni hacen falta las palabras.
Bien porque ya está dicho todo, o porque no se dijo nada que merezca ser
desdicho . Aunque casi ni se discute, y son mayormente una liberación, es imposible que no te dejen un regusto amargo
en la boca que tardará tiempo en quitarse.
En el extremo opuesto están esas otras en las que se dice de
todo: lo que se piensa y lo que no,se rompen vajillas y se discute de forma
acalorada. Vamos que tus palabras son dardos envenenados y tú apuntas a dar. Estas
rupturas tienen algo de catarsis, al principio sientes como si te hubiesen
quitado un peso de encima.- Ya esta- ,piensas, -Esta echo y a partir de aquí
que sea lo que tenga que ser-. Pero pronto te arrepientes y te das cuenta que las palabras son el arma
arrojadiza más peligrosa que existe y que como mucho pueden ser perdonadas,
pero nunca olvidadas.
También están esas
rupturas en las que la otra persona es tan sumamente habilidosa , que te
convence con sus hechos o palabras para que seas tú la que le deje. Vale que él
es un cobarde y a ti al final te resulta
difícil no sentirte un poco idiota. Pero también hay que reconocer que esto
requiere una extraña habilidad que no todo el mundo tiene.
Otro tipo es la que
se produce por uno de los muchos medios
de comunicación que tenemos a nuestro alcance hoy en día. Es lo que se conoce
como ruptura 2.0 . Estos medios son: teléfono,
sms, email , Facebook , twiter y en el peor de los casos whatsapp. Digo en el
peor de los casos porque igual ni se molesta en escribirte palabras y te pone
el emoticón de la parejita con el corazón y a continuación el de la mierda con ojos. Aquí
lo peor es que no tienes derecho al
portazo final, y pocas cosas hay más frustrantes en la vida que esa. Esta
ruptura demuestra bastante bajeza por una de las partes. Pero que tire la
primera piedra quien esté libre de
pecado.
La ruptura que más adeptos tiene, pero que sinceramente a mí menos me gusta, es esa en las que se
sigue siendo amigos. Yo personalmente no creo en ellas, las veo una americanada
total .Casi siempre se producen porque uno de los dos sigue colgado y en su
interior piensa que mejor ser follamigos que no ser nada. No suelen acabar bien,
porque no dan lugar a la distancia tan necesaria para que el dejado pueda
maldecir al otro, autocompadecerse y finalmente superarlo, siempre en este orden.
Finalmente existen esas rupturas que son una especie de ritual aceptado, normalmente
protagonizadas por esos amores atormentados
de los de ni contigo ni sin ti. O por personas que se sienten atrapadas y no son muy valientes, que o bien no tienen la habilidad de hacer que les dejen o por defecto no disponen
de internet para mandar un mensaje.
Estoy pensando que me va a costar mucho escoger la canción
para esta entrada, porque conozco muchas y maravillosas canciones de desamor. Os
dejo con una frase de Eugene O Neill y que cada uno saque
sus propias conclusiones: "El amor
nunca tiene razones, y la falta del amor tampoco. Todo son milagros."
lunes, 17 de febrero de 2014
ADOPTAUNPERRO.COM
Como soy una
mujer de acción y no creo que mi príncipe azul
venga a picarme a casa, utilizo todos los medios a mi disposición para
buscarlo; que no se diga que si no aparece es porque yo no le pongo empeño. Y
uno de esos medios es internet como no.
Asique he
decidido probar la enésima página de contactos que ha aparecido en la red:
adoptauntio.com. Es una página francesa y me ha llamado la atención la
impactante publicidad: la
presenta como la primera página que trata a los hombres como objetos. Tiene una
serie de ventajas como el hecho de ser tu quien decide con quien hablar ,o no
permitir en ningún momento que más del 50% de usuarios conectados sean del género másculino.
Me dispongo a rellenar el perfil. Para mi sorpresa solo me
lleva 5 minutos y no los 50 que te llevan
otras; que presumen tener un supuesto método científico gracias al cual te
buscan a la persona más idónea. Que yo me imagino encerrados en una habitación a un comité de sabios
cupidos despeinados nadando entre perfiles, para al final unir a los usuarios de forma aleatoria ,por eso de que todos sabemos que el amor es caprichoso e irracional.
Escojo una
foto medianamente elegante y divertida ,
que no es la de la orla pero tampoco estoy en bikini, porque si lo que se
persigue es que sean ellos los objetos , no lo veo coherente. Con toda mi buena voluntad me dispongo a ver que se cuece.
Nada más
entrar compruebo, tanto viendo los perfiles de ellos como los de ellas; que la página es una especie de Mujeres , hombres y viceversa on line , llenas de autofotos echas delante del espejo del
baño poniendo morritos, frases grandilocuentes sacadas del Facebook y anuncios
llenos de faltas de ortografíaen los
que se leen cosas del tipo: No se que hago aquí, soy amigo de mis amigos, y no
busco sino que espero a que me encuentren……
Pero bueno
no es cuestión de ser puristas ni ponerse a hacer demagogia , asique con una
mente abierta empiezo a curiosear.
El funcionamiento
es el siguiente,:ellos te mandan un flechazo y a partir de ahí tu decides si
quieres hablar con ellos , o sino directamente se lo mandas tu a ellos.
El primero es Nico, 20 años, tengo curiosidad por
saber que me va a contar así que lo acepto. Evidentemente Nico, como la mayoría
de los adolescentes , quiere cumplir la fantasía de la treinteañera
experimentada. Le digo que es tan sumamente joven que podría ir a la cárcel. Me contesta que no, a no ser que le mate. No puedo más que
aceptar que el niño tiene recursos. Amablemente le digo que se busque a una de su
edad y le digo adiós. Vale que a la cárcel no iría pero seguro que al infierno
si.
Carlos, 36
años. Parco en palabras , con cuerpazo y con esas manos que tienen los hombres
que trabajan con ellas que tanto me gustan. Compartimos la afición por los
mismos deportes. No me cuenta ninguna película: está buscando a una chica con
la que ir a escalar, beber cerveza y apoyarse mutuamente. Acaba de salir hace
poco de una relación de dos años y no busca nada serio. Aunque ya he conocido a hombres como Carlos y el apoyo
suele ser unidireccional, osea únicamente de mi hacia él, me gusta su
sinceridad , ante tanto postureo. Por lo que le dejo
en reserva, ya me pensaré que hago con
él y si corro el riesgo de adoptarle.
El siguiente
es Luis, 32 años, es de los pocos que tienen en su perfil que buscan una
relación estable. Los otros estados son literalmente: rollo de una noche , contrato
temporal y no indicado. Luis no es feo y tiene un perfil aceptable. Se expresa
correctamente y aunque no tiene una gracia desbordante y claramente está encantado de conocerse a sí
mismo, le doy una oportunidad. Después de varios días charlando con él empiezo
a ver fisuras. Es de ese tipo de hombres que esperan a aquella “que les robe el
corazón”, y digo esperan porque aparte de esperar, poco más está dispuesto a hacer. Entre espera y espera por supuesto no le hace ascos a un polvo casual como el mismo
me cuenta. Decido darle puerta, me gusta la gente que aunque no lo consiga ,intenta
ser coherente entre lo que dice, lo que piensa y lo hace.
Mario, 35
años, tiene una única foto ,todo su perfil es extrañamente normal, sin citas,
sin canciones en inglés y sin una lista interminable con las supuestas
películas “de culto” que ha visto. Me
contesta con un ocurrente email lleno de gracia . Es inteligente, simpático, sabe
como conquistar a una mujer ,escribe muy bien y parece que se toma en serio lo
de buscar a alguien compatible. Durante semanas nos intercambiamos kilométricos emails. Cuando empiezo a pensar
que esta vez sí que voy a tener suerte;
y me pregunto si es posible enamorarse de alguien que nunca has visto, me pide
que quedemos. Entonces el miedo se apodera de mí y le doy largas. Parece decepcionado
pero seguimos con los emails. A las dos semanas decido superar mi miedo y esta
vez le propongo quedar yo, pero esta vez el que se acojona es él.Como excusa me dice que
yo soy “demasiado intensa” para él. A los dos días se borra.
Adrián, 39 años, durante un día entero hablamos y
parecemos tener cierta conexión. Nos gusta la misma música, las mismas pelis, hace
deporte ,y es sencillo que no simple .Lo
único que me echa para atrás es que tiene gato, una de mis muchas fobias irracionales de las que algún día os
hablaré. Me pide añadirme al facebook y a partir de ahí la comunicación se
vuelve cada vez más distante .Eso sí, le da religiosamente me gusta a todo lo
que yo publico. Como hace tiempo que he
dejado de intentar descifrar que pasa dentro de la mente de un hombre…….. Le
tengo ahí, a ver por donde sale.
Viendo el
escaso éxito con los de treinta decido probar con los de veintitantos.
Y así
aparece Miguel, 27 años, un anuncio lleno de kas, alguna falta de ortografía y ni un solo signo de puntuación. Pero tiene
esa gracia y desparpajo que te dan los veinte años. Hago la vista gorda con las
faltas, culpando al sistema educativo , y me dispongo a ver que
me cuenta .En la tercera frase me pone un “wai” , pienso que Cervantes debe estar
revolviéndose en su tumba.Como eso es más de lo que yo puedo soportar le digo
arevoir.
Nano, 28
años, no tiene foto, pienso que se ha confundido de página y que realmente cree
que esta en un foro. Siento curiosidad por el motivo, asique le pregunto el
porqué. Me dice que no quiere que le juzguen por el físico. ¡Acabáramos! ,si le
parece le juzgo por su comida favorita…..Solo puedo pensar en lo perdidos que
andan algunos.
Pedro, 26
años, está molesto porque dice que la página denigra a los tios, y que si
hubiese sido al revés todas las feministas del mundo se hubiesen levantado en
armas y la hubiesen cerrado en dos días. Dice que está pensando en hacer él una
que se llame adoptaunatiti.com. En mi interior tengo que estar de acuerdo con
él, pero después de siglos de dominación machista y de que la mujer haya sido
tratada como objeto sexual por
excelencia, me cuido mucho de decirlo y tirar piedras contra mi propio tejado.
Con este
sigo hablando por line ,pronto me habla de liberación femenina y de como por culpa de actitudes como la mía , que él
no considera suficientemente abierta, los hombres lo tienen tan dificil . Simplemente le contesto
que mi liberación esta
estupendamente y que la uso cuando,
como y con quien me da la gana, no sin
antes mandarlo a paseo por supuesto.
Después de
varias meses, no sé si tirar la toalla o seguir en la página a modo de experimento
sociológico que pueda ayudar a alguna usuaria. Hablo con uno de mis muchos
amigos solteros , y le hago un resumen de mis infructuosos avances en ella. Me dice que me sale más a cuenta adoptar un perro. “Un perro te va a
querer a cambio de un plato de comida al día, siempre se va a alegrar de verte
así pasen dos minutos o dos semanas, y
te va a sacar de casa”. Me quedo
pensando en ello muy seriamente y llego
a la conclusión ,que tal y como está el patio es un consejo muy a tener en
cuenta.
viernes, 14 de febrero de 2014
MIS PRIMEROS PANTALONES
Eran de color azul mahón, de algodón, forrados y con pinzas. No recuerdo la edad
exacta que tenía, pero no creo que pasase de los 8 años, y esta foto es del
día que los estrené.
Es curioso, porque aunque soy un desastre recordando nombres,
fechas y otros detalles relevantes; siempre recuerdo la ropa que llevaba en una
u otra ocasión.
Cuando me imagino a
alguien querido , lo veo vestido con una
determinada prenda que en mi inconsciente lo representa. Con que nos vestimos a
fin de cuentas dice bastante de lo que fuimos, de lo que somos y de lo que
queremos ser.
De niña recuerdo
pasarme las tardes delante del armario vestidor de una de mis
tias, disfrazándome con sus vestidos, sus
estolas, sus collares y sus
zapatos. Aquel armario era una especie de tesoro que me transportaba al día en
el que yo fuese mayor ,y de aquella
guisa , me pasase las tardes tomando café
en una de esas elegantes terrazas del parque al que me llevaba mi abuela.
Audrey Hepburn dijo en una ocasión que mientras algunas personas sueñan con piscinas,
ella soñaba con armarios. Algo parecido me pasa a mi.
Mi familia es
una especie de matriarcado, encabezado por esas mujeres de antes con escasa educación reglada, pero que igual
que trabajaban la tierra, criaban hijos y sacaban adelante negocios ; hacían
primorosas labores de costura. Todas ellas son extremadamente coquetas y pueden pasarse
horas hablando de los detalles de ciertos zapatos o del corte de ese abrigo que
fue pasando de madres a hijas.
Mi infancia ha transcurrido entre los bordados de mi madre, las máquinas de coser de mis tias y los burdas de mis primas. Soy capaz de distinguir entre un crepé y una
alpaca, y lo primero que miro de una prenda es la composición. Me fascinan las mercerías , sobre
todo si son antiguas; y nada me relaja más que pasarme horas revolviendo entre
botones, lazos y pasamanerías.
Pero volvamos a esos pantalones, algo tan aparentemente poco significativo, pero que tanto esconden.
Al ser la primera hija de mi madre, y venir al mundo de
forma tardía e inesperada, mi madre siempre se sintió un poco descolocada sobre la educación que debería darme; y por extensión sobre como debería vestirme. Aunque
en un primer momento parece que quiso hacer de mi una niña modosita y comedida , estaba
claro que yo ya apuntaba maneras de chicazo. Mis rodillas y mis codos a modo de
mapa mundi en relieve así lo demostraban. Al final como todas las madres del
mundo, lo hizo lo mejor que supo, y el resultado final no ha sido del todo
malo.
Resumiendo hasta ese momento mi madre solo me había vestido
con faldas y vestidos. Por ello recuerdo perfectamente la emoción que sentí el
día que apareció con aquellos pantalones.Y
esa foto , en la que poso con una actitud un poco chulesca, la recoge .Parecezco estar
diciendo : Aquí estoy yo y nada me va a parar.
Recuerdo que con esa edad mi madre tampoco me había querido comprar
nunca una bici, por miedo a que me hiciese daño. En cambio yo tenía un carricoche
aurre, a imitación de los de verdad; con
su saco de puntillas y su muñeco recién nacido de carne, vestido con ropita
echa a medida , que era la envidia de
todas las niñas del vecindario.
Aunque mi madre no lo quisiese ver ,estaba claro que para la niña nerviosa e
inquieta que era yo , pasear aquel
carricoche no era suficiente. Sin embargo yo tenía mis recursos ,y una especie de
acuerdo tácito con una vecina por el cual yo le prestaba mi cochecito,y ella a mi su bici. Ni que decir cabe que de esta transacción
mi madre no tenía conocimiento alguno.
También recuerdo un día en el que atravesé la carretera
nacional a toda velocidad, al ser
incapaz de frenar bajando una empinada cuesta. Aquel día sentí miedo no
cabe duda, pero también conocí lo que es la adrenalina. Esa sensación me
enganchó hasta el día de hoy ,y hace
que me apasione cualquier deporte que me ponga al límite.
Por todo esto recuerdo
con tanto cariño esos pantalones, por lo que supusieron en mi vida: esa
sensación de libertad, ese placer por sentirse uno más entre los chicos, y en general ese ansía por hacerse
mayor.
jueves, 13 de febrero de 2014
MI AMIGO GAY
Como toda soltera moderna , mi mejor amigo es gay. Nos
conocemos desde la facultad y es una de las personas más buena y geniales que conozco.
El me llama cariñosamente “Puti” y yo a él “Mi lexatin con patas”. Tenemos esa
confianza y cercanía tan difícil de conseguir y que tanto bien me hace. Así como existen
personas que te roban la energía, él es capaz de transmitírtela aun estando a
cientos de kilómetros.
Estoy convencida que
él, al igual que yo equivocamos la carrera. Si yo debería haber sido
periodista, el debería haber sido psicólogo. Yo no tengo claro que tal periodista
hubiese sido, pero estoy segurísima que él hubiese sido un maravilloso psicólogo. Es de ese tipo de
personas que tienen la capacidad de llegar a todo el mundo: desde el niño
de 6 años, hasta la anciana de 80.
Tenemos muchas cosas en común; sobre todo nuestra
pasión por la moda y los chulazos , así como nuestro gusto por la estética y todo lo que
huela a diseño. Esto último por simple deformación profesional.
También nos unen
nuestras adiciones: mientras él es zapatoadicto, yo soy bolsoadicta. Los dos
estamos de acuerdo que estas adiciones esconden carencias , pero no nos
flagelamos por ello sino que las
aceptamos plenamente , loreal porque nosotros lo valemos. Como el mismo dice los enfermos no somos nosotros sino los demás, porque aquel que no sucumba a la
llamada de la diosa publicidad , para que engañarnos, algo raro le pasa.
Gracias a él he descubierto el ambiente gay: desde los
locales más “in” donde van los guapos tipo Jesús Vazquez a los antros de transformistas rollo Carmen de
Mairena .En todos ellos nos hemos divertido mucho.
Dos veces al año quedamos
para hacer terapia presencial mientras nos recorremos el centro de Madrid o nos asoleamos en la
playa. Aprovechamos para hablar de lo
humano y lo divino y nos reímos de todo y de todos. Nos imaginamos que somos tan
sumamente cool que algún día cerrarán una de esas tiendas de Serrano ,en las que solo nos atrevemos a mirar el escaparate, solo para nosotros dos.
El resto del tiempo , nos seguimos por Facebook, donde el
escribe poéticas y enigmáticas frases y yo escribo un poco lo que me sale de
dentro ese día. De vez en cuando
hacemos partylines telefónicos en los
cuales, por regla general ,yo le hablo de mis múltiples crisis existenciales y
el me psicoanaliza. Me dice maliciosamente que yo quiero ser Carrie Brawdsah pero que me quedo en Briget Jones. Me temo
que no puedo más que darle la razón.
Mi amigo tiene la teoría de que hasta los cuarenta no
aparecerá el amor de nuestra vida, y que hasta ese momento es necesario
pasar por varias pruebas y errores que nos preparán para el acierto.
Le digo, que sinceramente, yo ya empiezo
a estar un poco cansada de tanto experimento.
También he aprendido que los gays tienen los mismos problemas a nivel
sentimental que un heterosexual cualquiera. Esto último es sin duda lo que más me ha
podido llamar la atención ;y lo que ha hecho que no de rienda suelta a mis posibles
instintos lésbicos. Porque haciendo un ejercicio de introspección crítica, si
ya me es difícil conectar con un hombre , me imagino la locura que tiene que
ser intentarlo con otra como yo.
martes, 11 de febrero de 2014
EL DÍA QUE DESCUBRÍ QUE ERA MAYOR
Vale que no fue un día concreto a una hora determinada. Pero si es cierto que
llega un momento en el que no puedes más
que constatar tal hecho y preguntarte….. ¿Como he llegado yo hasta
aquí?
Cuando me preguntaban de pequeña que quería ser de mayor
nunca sabía que contestar.
A no ser una etapa en
la que, mientras todas las niñas querían ser modelos, yo quería ser
presentadora de Informe Semanal. Yo siempre fui una niña un poco resabiada y me gustaba marcar las diferencias.
El problema es que creo que a día de hoy tampoco tengo claro
que lo sepa, esto ya no es tan
encantador sino bastante preocupante pensareis. Puede ,pero al menos me he dado
cuenta del motivo: lo que yo no quiero es ser mayor.
Me di cuenta que oficialmente era mayor después de ver varias
convocatorias y becas ,en las que el
límite de edad eran los 35 años. Llegué
a la conclusión que en nuestra sociedad
actual pasas de ser joven a ser jubilada; si perteneces a una de estos
dos grupos se supone que tienes ayudas
estatales en un caso, y tu pensión en el
otro. Si estas en esa especie de limbo vital que hay en medio parece ser que no tienes derecho a nada, solo a producir,
y si la crisis te deja.
Esta fue la primera señal de alarma, pero aún quedaban otras
.
Acudo a mi médico de cabecera a recoger unos análisis
rutinarios y muy serio me dice que tengo colesterol, y del malo.¿Colesterol? pregunto
extrañada,¿ y del malo? repito incrédula. Bueno pero si hay dos tipos, rollo el
ying y el yang, ¿uno compensará al otro no?.
Acostumbrado a mis salidas de madre ni se molesta en
contestarme y me extiende una receta. Eso si, mi colesterol no es producido por
mis malos hábitos, sino por la madre genética. El buen hombre debe pensar que
eso me animará, o por lo menos hará que no me flagele aún más. Que poco me
conoce……
Con la moral algo tocada salgo de la consulta y de repente se cruza un balón en mi trayectoria. Al otro
lado de la calle un mofletudo niño me suelta a bocajarro: ¿ Señora, me pasa el
balón?.
Vale que yo a su edad
tampoco concebía la vida más allá de los treinta , pero eso no evita que mi primer pensamiento sea rajárselo sin
más.
Ya bastante deprimida decido someterme a la terapia de
choque femenina más universalmente conocida, y que en pocas ocasiones falla: ir
decompras.
Pero mi gran error es hacer una primera parada en una
perfumería a comprar una hidratante. Con
la crema hidratante la amable dependienta me da una muestra de contorno de ojos
para las patas de gallo, y otra de noche para la tez apagada, y ya puestos esta
nueva para la celulitis , y otra de un serum iluminador muy bueno …….Cuando las lágrimas
empiezan a agolparse en mis ojos, pregunto tímidamente:¿ tan mal me ves?.
Muy resolutiva me responde: No mujer ,pero tenemos una edad
en la que hay que empezar a cuidarse. No puedo más que pensar que esto se lo
dice a todas “las de nuestra edad”.Aunque pienso en decirle que me importa un
rábano la edad que tiene ella, que estoy intentando olvidar la mía y que se puede
meter las muestras por donde le quepan; únicamente le suelto un escueto “gracias”
y echo a correr hacia la puerta.
Esa misma noche me reuno con mis amigos más fiesteros, los
conozco desde hace mucho pero nos vemos solo una o dos veces al año. Estoy segura
que ellos si sabrán como animarme. Pero la cena se convierte en una especie de
rémora de cuando esas cenas acababan a las once de la mañana del día siguiente, borrachos
como cubas . Bonito día para ponerse nostálgicos.
No hay marcha atrás,
pienso, soy irremediablemente mayor .
Ya en casa, me espera
el que en ese momento, tengo la ilusión que sea el padre de mis
hijos. Entre gimoteos le cuento lo acontecido para acabar con un lacónico: ¡Soy
vieja!. “Puede” me responde él,” pero
eres mi vieja”. Entonces se me olvida mi
horrible día, le beso, y doy gracias a Dios por la sencillez bien entendida de
algunos hombres. No puedo más que
recordar lo que decía Oscar Wilde: no se quiere a alguien por su
apariencia, sino porque canta una canción que solo tú puedes escuchar.